Ya dejamos atrás 2015 y con él se va lo más fuerte del tránsito de Urano y Plutón, que ha significado un gran cambio en la relación entre los ciudadanos y el poder. Esta energía ha estado activa en los últimos años y nos permite entrar en un nuevo aspecto que estará activo en los dos últimos meses de 2015 y prácticamente todo el 2016.
Este aspecto es la cuadratura entre Saturno en Sagitario y Neptuno en Piscis. Las fechas exactas de este tránsito son las siguientes, aunque hay que dejar claro que su actividad más poderosa se dará varias semanas antes y después de cada una de ellas:
- 26 de noviembre de 2015
- 17 de junio de 2016
- 10 de septiembre de 2016
En el plano simbólico, la cuadratura entre ambos planetas implica un choque entre la realidad y los deseos, entre el mundo práctico y el ideológico, entre “predicar y dar trigo”. Es un aspecto de conflicto, en el que muchos querrán huir por los terrenos de la fantasía o el fanatismo, mientras la realidad les persigue sin tregua.
El aspecto entre Saturno y Neptuno comenzó a actuar en noviembre de 2015, y se relaciona, a mi juicio, con varios acontecimientos que se han dado en ese período.
- Sin duda hay que señalar los atentados de París como un hecho de gran relevancia, pues si bien ha habido otros actos similares en otros países, no han tenido la repercusión ni tendrán los mismos efectos que lo sucedido en Francia (así funciona el mundo). El conflicto en Siria se está convirtiendo en un campo de batalla internacional, una guerra extremadamente compleja donde han entrado nuevos combatientes (Rusia, Francia, Reino Unido), cada uno con sus propios intereses y donde todo es demasiado confuso.
- No hay que olvidar que los últimos acontecimientos están envueltos en la crisis de refugiados que vive la Unión Europea y que está llevando a un cierre de fronteras inédito (Neptuno en Piscis es el refugiado que llega por mar, Saturno es la frontera). Por todo ello, el conflicto Sirio y las repercusiones para Europa están lejos de acabar.
- Otro acontecimiento interesante sucedido en torno a las fechas de la primera cuadratura Saturno Neptuno es la victoria del candidato opositor en Argentina, por lo que puede suponer como cambio de tendencia en la política latinoamericana. El mismo hecho de que la victoria de Macri haya sido contestada por el gobierno saliente y sus allegados (que no parecen aceptar los resultados) es un indicio de esta lucha entre fuerzas que supone la cuadratura. Teniendo en cuenta las energías que están en vigor en el momento de su elección, el nuevo presidente está llamado a poner orden en las cuentas del país, buscando la manera en que Argentina pueda ser solvente y creíble en el contexto internacional. No lo tendrá nada fácil, y la conflictividad interna, azuzada por sus enemigos, será creciente en 2016.
- Otro país con tensiones crecientes es Venezuela, que también ha vivido un cambio alrededor de las fechas de la primera cuadratura. Aquí, la situación puede ser aún más complicada que en el caso argentino, debido a la fortaleza del régimen y del ejército.
En el caso de España, las fuerzas que emergieron con la cuadratura de Urano y Plutón se ven ahora con la responsabilidad de dar respuestas concretas a los retos de un país que no se gobierna a sí mismo, sino que está supeditado a un orden superior (Europa).
El conflicto entre las buenas ideas y la materialización de las mismas va a ser evidente, lo que puede llevar, cada vez más a un desengaño por parte de un gran sector de la población. Como ya señalé al comienzo de 2015, las fuerzas políticas emergentes tuvieron un gran éxito en las elecciones locales de mediados de año, pero corren el riesgo de empezar a decepcionar a sus votantes en la gestión de los grandes temas a partir de la nueva legislatura que comienza en enero de 2016.
Saturno representa el espíritu de lo concreto, de lo que ha sido probado y tiene un largo recorrido. Es la energía que va a triunfar en la segunda mitad de 2016, después de una gran sacudida de las conciencias (que se puede dar hacia mayo o junio con la Gran Cruz Cardinal). El segundo momento de dificultad o solución se dará en septiembre, cuando coincide la cuadratura de Saturno y Neptuno con los eclipses de sol y luna.
Septiembre es también el momento en que Júpiter cambia de signo, entrando en Libra y abandonando Virgo.
La energía de este 2016 no es propicia para los idealismos ni para proyectos sin base. Será necesario por tanto que todos tengamos muy claro hacia dónde queremos ir y cómo, porque todo aquello que sea superfluo o aventurado, puede saltar por los aires. Es importante no guardar deudas, que se multiplicarán durante el año, ni endeudarse más allá de lo conveniente. Para todos será un año de “poner los pies en el suelo” y prepararnos para cambios más profundos que están creciendo bajo la tierra.