La luna llena se produce cuando el Sol y nuestro satélite se encuentran en lugares opuestos del cielo, y por eso ahora el Sol, que se encuentra en Escorpio, proyecta su luz sobre la Luna en el signo contrario de Tauro. Pero nuestros dos luminares cuentan con sendos aliados en esta ocasión. El Sol tiene a Venus retrógrado a su lado. La Luna cuenta con el revoltoso Urano, también retrógrado. Así que esta Luna llena se plantea como un momento donde cada uno de nosotros tendrá que tomar una decisión, obligados más por las circunstancias que por nuestros deseos. La luna en Tauro suele buscar la seguridad de lo material, de lo conocido, pero con Urano alrededor, lo único seguro es el cambio.

La encrucijada de esta Luna llena en Tauro nos pide investigar y decidir entre la transformación o la estabilidad, lo nuevo o lo fácil, un hombre o una mujer, la ruptura o la comodidad. ¿Hacia dónde te diriges? Recuerda lo que sembraste en la Luna nueva del día 9. Si decidiste arreglar aquello que estaba pendiente, todo se encamina hacia un cambio que ahora se presenta urgente y accidentado, pero necesario.

Las lunas llenas siempre traen consigo cierta inestabilidad emocional. Pero es una inestabilidad que se nota con más fuerza en aquellos que no afrontan los retos que la vida les esté imponiendo. Por eso todo lo que llega trae un mensaje, y por eso ahora hay que tomar decisiones. Precisamente, el no tomar decisiones es la mayor fuente de inestabilidad que existe. Si aceptas un consejo: acepta lo inseguro porque lo único real es que no hay nada seguro.

Esta luna llena se produce el 24 de octubre de 2018, a las 16:46 horas GMT, en los 13 grados y un minuto de Tauro.