En estos días, la visión está reducida a un margen estrecho de la conciencia, lo que significa que no somos capaces de entender todo lo que nos pasa.
Aun así, dos grandes energías están actuando sobre todos nosotros. Por un lado está la visión asentada y volcada en objetivos concretos que todos tenemos en la zona Capricornio de nuestra Carta Natal. Por otro, la unión de cuatro planetas en la zona más artística, soñadora y espiritual de Piscis.
¿Hacia dónde van entonces los impulsos? ¿Hacia la materia o hacia el espíritu? La respuesta es que a corto plazo, es adecuado pensar con el corazón, abrir la mente a otras potencialidades, dedicar tiempo a lo afectivo y espiritual.
Pero la mirada a largo plazo debería estar enfocada en realizaciones prácticas, en materializar todo eso que ahora podemos imaginar, soñar, invocar. Si la espiritualidad o la creatividad no se aplica en la vida cotidiana ¿no se convierte acaso en una huida hacia delante?
Ahora los ánimos están demasiado exaltados, y las personas más emocionales van a tener un extra de sentimentalismo. Pero no olvides mirar a largo plazo. Imagina lo que deseas, contacta con tus guías, pide al universo, lo que sea más cercano a tu forma de entender la realidad. Pero no olvides que “a dios rogando y con el mazo dando”.
Esta Luna se produce en el grado 4 de Piscis a las 15:33 horas GMT del 23 de febrero de 2020.